¿Una tasa de impuestos corporativos mayor es garantía de mayor recaudación? Se reconoce al economista Arthur Laffer el haber puesto en la retina de las autoridades económicas del presidente de EE.UU., Gerald Ford, la idea de que un aumento en la tasa de impuestos no siempre aumenta la recaudación.
Ello, por los impactos negativos que mayores tasas de impuestos tienen sobre los incentivos a la inversión, el empleo y el emprendimiento.
Esta idea se ha plasmado en la curva de Laffer. Partiendo de una tasa de impuestos t = 0, la recaudación tributaria aumenta a medida que crece la tasa de impuestos, pero hasta un máximo cuando la tasa llega a t*. Luego, aumentos adicionales en la tasa de impuestos reducen la recaudación.
¿Cuál es esa tasa de impuesto corporativos que permite maximizar los ingresos por recaudación? Lo que nos muestran los datos de años recientes, es que, a pesar de existir en Chile un aumento significativo en la tasa de impuestos corporativos, los ingresos fiscales del impuesto de primera categoría como porcentaje han disminuido respecto del año 2012 en que alcanzaron un 4,3% del PIB (renta presunta + efectiva).
Ese fue un año de alto crecimiento, con una tasa de impuestos de primera categoría que aumentó casi 20%, pasando de 17% a 20% desde el 2011.
En 2016 el porcentaje de ingresos fiscales en relación al PIB llegó a 4,1%.
Así, aquí surgen indicios de que la tasa que permite maximizar la recaudación del impuesto de primera categoría como % del PIB, estaría más cerca del 20% que del 27% que tenemos en Chile.
Nadando contra la corriente
A diferencia lo ocurrido en Chile, donde la tasa de impuestos corporativos ha mantenido una senda de un sostenido crecimiento desde la década de los ’90, durante los últimos años los países de la OCDE se han movido a menores tasas.
Y, para que Chile pueda competir como un destino atractivo para la inversión debe contar con un sistema tributario que haga que sea más ventajoso invertir en Chile que en otros lugares.
Este no es un tema menor, y es una de las principales razones por las cuales Chile retrocedió en el ranking del Informe de Doing Business (DB). Como fue destacado en el DB2016 por el propio Banco Mundial cuando recalca que el aumento de la tasa de impuestos corporativos perjudicó el clima de negocios.
El fuerte aumento en la tasa de impuestos corporativos ha llevado a que muchos proyectos dejen de ser rentables. Y lleva a que estos sean postergados o eliminados desde las carpetas de negocios de las compañías, con consecuencias lamentables en la generación de empleos de calidad y el crecimiento de la economía.
La buena noticia es que el nuevo gobierno ha anticipado su interés de presentar prontamente una propuesta de perfeccionamiento tributario. Esta debería simplificar el sistema, dar mayor certeza jurídica y recuperar los incentivos para la inversión.
Todo ello reconociendo un marco de rigidez fiscal en que existen holguras negativas. Y donde solo será posible avanzar en una rebaja gradual de la tasa de impuestos que va a estar supeditada al crecimiento de la economía.